Los corazones de los membrillos con los que hemos hecho el dulce de membrillo y el agua de su cocción.
Pesamos los corazones y los ponemos en un caldero con el mismo peso de azúcar, los cubrimos con agua que hemos reservado de la cocción de los membrillos y una cascarita de limón.
No le ponemos canela, puesto que ya la tiene de la preparación anterior. Dejamos que cueza durante una hora, enfriamos y colocamos en frascos de cristal.
A veces, dependiendo de la calidad de los membrillos, no llega a endurecerse la jalea. Eso es porque no tienen mucha pectina y se soluciona , o bien poniendo más membrillo (o manzana) o una hojita de gelatina neutra (esta opción no me gusta)
que original... y esto si es usar un membrillo al 100%
ResponderEliminarUn abrazo
Si, es cierto....
ResponderEliminarEn casa se hace así siempre; claro que sale muy poca cantidad y por eso hay rifi-rafes por ella, jajja.
Besitos Cova